nos
hemos puesto nombres tantos
nombres de
segundas pieles y
espíritus como para
ir ocupando las
constelaciones que nos
separan para
hacerlas nuestras en el
alma porque nadie
puede quedarse las
estrellas te
regalo pedacitos de ellas a
penas reflejos de las
luces de
mil años atrás disculpa si te
quiero alimentar tu
corazón de
sol tu
aspiración a
cometa onírica para que
subas a esas
aguas con las
otras sirenas de
mil nombres
viajando a
aguas más
cálidas galaxias más
brillantes más
amables sin
corrientes tormentosas te
quiero a
salvo te
amo brillando acá y
donde sea que
vayas yo te
miro floreciendo incluso con
todas las nubes entre
nosotras te
veo cambiar de
color sumar pecas sonrientes a tu
estela escarchada y
esperaría mil
estaciones a que el
cielo se
despeje para
verte pasar aunque
sea una vez más