yo
nunca hablaría de
lesbianas porque no
existen no
sé de dónde
sacaste que
soy lesbiana defíneme con tu
lengua pero sin
tocarme a
menos que
seas mujer no
es lesbiano las
lesbianas no
existen no te
las
puedes imaginar no las
puedes apuntar con tu
dedo se
escurren entre tus
pestañas como
fluido vaginal de
película en
pleno ardor se
revuelven en tu
cabeza con tus
criaturas pornográficas y las
figuras de la
virgen en tu
casa tu si
crees en las
monjas pero las
lesbianas no
existen y yo
no
hablo de
nada porque
soy una
invención de mi
propio cerebro desviado un
reflejo carnal de mi
pasión rota subterránea las
lesbianas no
existimos y nos
ponen a la
altura del
olimpo con sus
espaldas