me
viste la
cara conchatumadre
otra vez me
mostraste al
diablo que
vive en tu
nuca y me
odio por
odio por
sorprenderme como si
no
hubiera visto jamás tus
máscaras aun cuando
máscaras aun cuando
te
he conocido tantas veces me
duele mi
ingenuidad mi
incredulidad es la que
me azota y el
dolor se me
incredulidad es la que
me azota y el
dolor se me
regenera como los
pedazos de
piel pellizcada por mis
garras nerviosas
tiñosas
tiñosas